26 May ¿Viajamos?
Las 5 comidas más ricas del mundo, ¡según Floxie!
Esta es una nota que te va a dar muchas ganas de viajar… ¡y muchas ganas de comer!
La pandemia hizo que tengamos que esperar un poco más para volver a recorrer el mundo y, para manejar la ansiedad, ¡decidimos elaborar una lista de destinos pendientes!
Como en Revista Cúrcuma somos fan del turismo gastronómico, saber cuáles son las 5 comidas más ricas nos va a ayudar a decidir a dónde ir. Por eso recurrimos a la número uno en viajes: ¡charlamos nada más ni nada menos que con Floxie!
Y estos son los platos que nos recomendó:
1 – Pasta Carbonara (Roma, Italia)
Su receta lleva pocos ingredientes: huevo, pimienta, guanciale o panceta, queso pecorino o parmesano y, por supuesto, ¡la pasta! (que puede ser en forma de fideos spaghetti o bocattini).
2- Currywurst & Donner Kebab (comidas callejeras de Berlín, Alemania)
El Currywurst es una salchicha alemana cocida o asada a la parrilla, que generalmente se corta en rebanadas y viene acompañada por una salsa de ketchup y curry en polvo. Suele complementarse con papas fritas y su sabor es imbatible.
Por otro lado, el Donner Kebab es también muy popular en Berlín: es un plato de medio oriente compuesto por láminas finas de cordero, pollo o ternera, generalmente en un pan pita con verduras y otros acompañamientos. ¡Está por toda la ciudad!
3- Pad Thai (Tailandia)
Es un plato típico salteado al wok, cuya base es de tallarines de arroz y tiene huevo, salsa de pescado, pasta de tamarindo, pimiento rojo y brotes de soja. Generalmente lleva langostinos (aunque existe una versión con tofu, pollo o carne) y tiene maní por encima. Es agridulce y se sirve con limón.
4- Camembert Roti (Provenza, Francia)
Es una rueda de Camembert horneada con miel o frutos secos. Hay distintos tipos pero lo rico de todos es que cuando se corta, se derrite el queso… ¡y es exquisito! Los franceses logran ese efecto haciendo unos “tajos” con papel aluminio, antes de hornearlo.
5- Melón Pan (Japón)
El pan de melón es parte de la pastelería japonesa y es delicioso: por fuera es crocante y por dentro es esponjoso. ¡Casi como morder una nube!